- 294 páginas
- Año 2016
- Publicado por Phoebe (2023)
Cuando no tiene la nariz dentro de un libro ni los dedos volando sobre el teclado de un ordenador, se mete en la cocina para crear platos gourmet. Te la puedes encontrar, con unos tacones de al menos diez centímetros, llevando a los niños en el coche o puede que con su marido, programando sus viajes de negocios. Es una suerte que sus personajes hagan lo que ella dice, porque ni su labrador la escucha…
Cooper Stone es una estrella del hockey mundialmente conocido, pero debido a una lesión va a tener que pasar todo el verano entrenando con Parker, que tiene un centro de hockey y es fisioterapeuta y entrenadora. A pesar de no empezar con buen pie, Cooper se siente atraído por Parker y no va a parar hasta conquistarla, a pesar de que ella ya no confíe en el amor por una reciente infidelidad y aunque tenga dos hijos.
No hay nada que me guste más que un buen sports romance, para qué mentir. Este tipo de sagas que siguen a los distintos personajes de un equipo, en este caso de hockey, o una familia y cuentan la historia de cada uno de ellos, me fascinan. Me ha recordado mucho a la saga Kiss me de Elle Kennedy, aunque en este caso un poco más madura porque los personajes están en la treintena. Hacía mucho que no encontraba una saga de este estilo más allá de los romances de oficina, y me ha ayudado a salir un poco de esta zona “de confort”.
Los personajes me han parecido maravillosos. Tanto Cooper como Parker son protagonistas muy redondos y a los que acabas sintiendo que conoces a la perfección. Parker tiene treinta y cinco años y dos hijos a los que quiere con locura, y ha pasado por dos años muy duros después de descubrir que su marido, el que esperaba que fuese el amor de su vida, la estaba engañando con su asistente. Desde entonces Parker se ha centrado en rehacer su vida y superar ese momento, además de criar a sus hijos, pero no se ha vuelto a fijar en ningún hombre… hasta que parece Cooper.
Cooper es un protagonista maravilloso, lo tiene todo: es dulce, cariñoso, sabe lo que quiere y a pesar de tener treinta años no se deja acobardar por los hijos de Parker, sino todo lo contrario. Además, los hijos de Parker, Allison y Matthew, tienen mucho protagonismo y me han parecido más realistas que en otras novelas. Es decir, es cierto que Allison para tener cinco años se porta demasiado bien y no tiene las rabietas típicas de una niña de su edad, pero Matthew, al ser un adolescente, no se fía de primeras de Cooper y le cuesta un poco aceptarlo en su familia, algo que ha sido un poco más realista y no tan de familia perfecta.
He de decir que, aunque la relación entre Cooper y Parker me ha gustado mucho, ha habido una cosa que me ha parecido incoherente. Algo tan perfecto empieza como un enemies to lovers porque su primer encuentro no es demasiado amistoso, pero sin motivo alguno Cooper cambia radicalmente su actitud con Parker e intenta seducirla. Me ha gustado el cambio, sí, pero más me gusta un buen enemies to lovers a fuego lento, y he sentido que este ha sido demasiado apresurado. No obstante, me ha gustado mucho la evolución de su relación.
El único fallo que le pongo a la trama es que a veces me saturaba el nivel de romanticismo y de perfección de Cooper (aunque de vez en cuando pecaba demasiado de posesivo), pero no ha sido algo exagerado. Mi problema es que me encanta el típico tira y afloja, y aquí se me ha hecho demasiado breve, enseguida se han enamorado. Y, bueno, a mí me gustan las escenas hot en los libros, pero en este libro hay demasiadas. En prácticamente todos los capítulos hay escenas sexuales y se me han hecho excesivas. Es decir, ha habido un momento que han sido tan seguidas que me has he tenido que leer por encima para no saturarme.
Sobre la narración, me ha gustado mucho la forma de escribir de Natasha Madison y no ha sido ninguna sorpresa porque ya he leído Tentar al jefe, aunque no me gustó tanto como esta novela. Por cierto, os recomiendo leer primero esta saga antes que Tentar al jefe porque Cooper, Parker, Allison y Matthew hacen un cameo en ese libro que, al no conocer el contexto, me dejó algo confusa, aunque podéis leeros en el orden que queráis. Respecto a la narración de nuevo, me habría gustado que tanto Parker como Cooper narrasen de manera alternativa, porque hasta los últimos capítulos no leemos el punto de vista del protagonista.
En conclusión, Algo tan perfecto me ha gustado muchísimo, he conectado un montón con los protagonistas y tengo muchas ganas de seguir leyendo a Natasha Madison, de hecho, en el momento en que estoy escribiendo esto ya casi estoy terminando el segundo libro de la saga, protagonizado por Matthew. A pesar de tener pequeños fallos, la relación me ha enamorado y han conseguido que me emocione al final de la novela porque quería lo que ellos tenían y me rompía el corazón saber que no iba a leer más sobre ellos, aunque por suerte son personajes secundarios del resto de la saga.
¡Hola!
Ya he visto reseñas muy positivas como la tuya y yo pensando que este tipo de novelas serían más de lo mismo. Me la apunto. Un besote!!!
HOLAAA
No lo conocia pero me llama la atencion
Hola.
Pues lo tendré muy en cuenta, también si los leo al final te haré caso en el orden de lectura.
Muchos besos.